Maduro aprueba $556 millones con la promesa de 500.000 viviendas para 2022
La promesa eterna del chavismo en materia de viviendas continúa con la insistencia en la Gran Misión Vivienda Venezuela y sus metas anuales que parecen contradecir la realidad de la economía venezolana y las capacidades del Gobierno.
En esta ocasión, el oficialismo renovó su meta anual estándar y anunció que en 2022 serán construidas 500.000 viviendas. Para lograrlo, el ministro de Hábitat y Vivienda, Ildemaro Villarroel, solicitó el monto de 2.555 millones de bolívares, equivalentes a unos 556 millones de dólares según el tipo de cambio publicado por el Banco Central de Venezuela (BCV).
Las metas a largo plazo son más ambiciosas y parecen ser menos factibles, pues durante un acto de entrega de la vivienda 3.900.000, Maduro afirmó que para 2024 se superará la meta de 5 millones de viviendas y se podría incluso superar por hasta 300.000 hogares nuevos.
Desde que inició este programa gubernamental, en 2011, la polémica no ha quedado al margen. Los números no encajan, las denuncias sobre corrupción, sobrefacturación y desvío de recursos son pan de cada día y además el estado de algunas construcciones deja mucho que desear
Maduro, por su parte, insiste en que 2021 fue un año de mejoría, recuperación y avance en materia económica y social. Además, presume de la existencia de esta misión bajo el concepto de la «desmercantilización» de la vivienda.
«Hemos logrado desmercantilizar la vivienda y convertirla en un derecho humano, no en una mercancia. Que a la vivienda tenga acceso todo aquel que la necesita», afirmó.
Con información de Tal Cual