Tecnología

Obra de arte creada por robot humanoide bate récords al venderse por más de 1 millón de dólares

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Un retrato del matemático inglés y descifrador de códigos de la Segunda Guerra Mundial, Alan Turing, fue subastado por 1,08 millones de dólares, superando con creces las estimaciones de venta, que oscilaban entre 120.000 y 180.000 dólares. La obra fue creada por un robot de inteligencia artificial (IA) llamado Ai-Da. Esta pieza, que rompió todos los precedentes de las obras realizadas con tecnología, fue bautizada como AI-God.

Se trata de la obra de arte más valiosa creada por un robot humanoide que haya sido vendida hasta ahora en una subasta.

La pintura de unos 2,2 metros atrajo 27 ofertas antes de ser entregada a un comprador no revelado según Sotheby’s, la compañía que administró la venta en Nueva York.

«El precio de venta récord de hoy para la primera obra de arte de un artista robot humanoide en salir a subasta marca un momento en la historia del arte moderno y contemporáneo y refleja la creciente intersección entre la tecnología de inteligencia artificial y el mercado global del arte«, señaló la casa de subastas.

Por su parte, el robot, autor de la obra que usa inteligencia artificial para hablar dijo ante los medios que “el valor clave de mi trabajo es su capacidad para servir como catalizador para el diálogo sobre las tecnologías emergentes (…) Invita a los espectadores a reflexionar sobre la naturaleza divina de la IA y la computación, al tiempo que considera las implicaciones éticas y sociales de estos avances», señaló el robot ultrarrealista que está diseño para parecerse a una mujer humana con rostro, ojos grandes y peluca marrón.

El retrato, llamado ‘AI God: Portrait of Alan Turing’ hace alusión al matemático británico pionero de la informática y conocido por crear las primeras bases de lo que hoy conocemos como computadora.

¿Estamos aprovechando al máximo la inteligencia artificial?
Justamente las investigaciones de Turing ayudaron a descifrar las comunicaciones alemanas durante la Segunda Guerra Mundial así como su “máquina de Turing” que fue diseñada para explorar los límites de lo que se puede calcular de manera automática.

La asombrosa suma que la obra de arte de Ai-Da alcanzó en una subasta marca un cambio en la forma en que se ve y valora el arte de IA en el mercado del arte, un cambio que Meller compara con la invención de la cámara.

La impresionante cantidad que alcanzó la obra de Ai-Da en la subasta representa un giro significativo en la percepción y valoración del arte generado por inteligencia artificial dentro del mercado artístico. El dinero planea ser reinvertido para los avances de los proyectos de inteligencia artificial.

Con información de france24