Internacional

Cirujana venezolana participó en reactivación de los trasplantes cardíacos en Ecuador

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Luego de 15 años de formación académica y otros 11 de ejercicio como cirujana cardiovascular, Indira Yánez siente que alcanzó una de las cúspides de su carrera: el pasado noviembre participó en una cirugía de trasplante cardíaco que, además de resultar exitosa, marcó el reinicio del programa de trasplantes de corazón en Ecuador. Para ella, es un logro no solo como profesional, sino también como mujer y migrante.

Fue la única venezolana que formó parte del grupo de especialistas que el sábado 13 de noviembre de este año materializó la reactivación de los trasplantes de corazón en territorio ecuatoriano, paralizados por más de 10 años. La cirugía se realizó en la Clínica Guayaquil, en el centro de la ciudad, a una paciente de 49 años con cardiopatía dilatada, que desde septiembre esperaba ser intervenida.

“Sentí una enorme alegría. En Venezuela nunca tuve la oportunidad de participar ni de ver en vivo un trasplante cardíaco”, dijo en entrevista con El Carabobeño. “Es una gran oportunidad la que me dieron, siendo extranjera y mujer, porque hay mucho machismo en este tipo de especialidades. También es una oportunidad para dejar el nombre de mi país en alto, que sepan que soy de Venezuela”.

Su rol consistió en asistir a sus colegas cirujanos, quienes extirparon el corazón enfermo y lo reemplazaron por el nuevo, durante todo el procedimiento que inició cerca de la medianoche del sábado y culminó aproximadamente a las 9:00 a.m. del domingo 14 de noviembre.

El donante fue un joven de 23 años, a quien le diagnosticaron muerte cerebral en el  Hospital Teodoro Maldonado Carbo de Guayaquil, luego de resultar gravemente lesionado en un siniestro vial. Según el Ministerio de Salud Pública, además del corazón, fueron donados los dos riñones, el hígado y otros órganos, logrando así salvar más de una vida.

Se trató de una intervención novedosa. No solo por ser la primera de ese tipo en más de una década, sino también por haber estado liderada por tres mujeres: las doctoras ecuatorianas Mónica Gilbert, Luciana Boloña y Paola Morejón, y porque el 60 % del equipo multidisciplinario fue personal femenino. Además, se involucraron profesionales de otros países, como Venezuela, Argentina y Colombia.

Después de la operación, informó la doctora, la paciente que recibió el trasplante cardíaco ha evolucionado satisfactoriamente. “Yo no me creía lo que había ocurrido. Cuando la vi despierta, que me sonrió y me agarró las manos como un gesto de agradecimiento, fue que caí en cuenta de la magnitud del procedimiento que habíamos hecho. Salvamos su vida con el corazón de un chico joven”.

Con información de www.el-carabobeno.com