2024
Douglas Játem Villa
Los venezolanos hemos dejado de vivir, o hemos estado suspendidos, durante 25 años. 25 años de mucha “bulla”, de mucha confrontación verbal, sin ignorar las demasiadas ocasiones en las cuales la pugna llegó a la negación de derechos esenciales, como la libertad. Ha sido un tiempo demasiado largo desperdiciado como colectividad, en un intercambio totalmente repetido de anuncios y promesas hasta hoy incumplidas. Han sido realmente 25 años de perseverancia en la lucha por los derechos humanos esenciales, lo cual es algo que debe registrarse en los libros de nuestra historia. Hoy estamos en días de Navidad y Año Nuevo, días de paz universal, días en los cuales la esperanza y la necesidad de bienestar, de libertad, de humanidad, se colocan en una posición de fortalecimiento. Son días para comunicar en sentido positivo. Por tal razón deseo expresar mi sentimiento y mi pensamiento a tono con la expectativa favorable en la época, y con el nivel de fuerza en ambos sectores en “juego”. Agrego que mi expresión ha sido inspirada en cierta medida por la palabra del Papa framcsco
Vivir implica considerar que la vida es la empresa más grande del mundo. Dejar la vida a la criatura que vive en cada uno de nosotros, libre, feliz y sencilla. Vivir significa tener un sentido realista de la capacidad de la persona. Creer que lo deseado es alcanzable. Tener la capacidad para adaptarse a una situación adversa. Dejar de sentirse víctima de los problemas y convertirse en el autor de la propia historia. Ser feliz no es solo disfrutar de la sonrisa, sino también reflexionar sobre la tristeza. Se celebran los éxitos y se aprenden las lecciones de los fracasos que impiden el bienestar de la humanidad. La vida no es un destino del destino, sino un logro para quien logra viajar dentro de si mismo. Dar gracias por cada mañana por el milagro de la vida. No temer a los propios sentimientos. Tener el coraje de escuchar un No, Es sentirse seguro al recibir una crítica, aunque ella sea injusta, Es tener madurez para poder decir me equivoqué. Es tener el valor de decir perdón. Ser capaz de empezar de nuevo cuando te equivoques. Es utilizar las lágrimas para regar la tolerancia, Es utilizar las pérdidas para entrenar la paciencia
FELIZ AÑO NUEVO 2024 PARA VENEZUELA, PARA NUESTRAS FAMILIAS, PARA LOS MILLONES DE SERES HUMANOS FOPRZADOS A SEPARARSE DE SUS FAMILIAS Y SIUS HOGARES. PARA LA TAN COMPLICADA HUMANIDAD.