Oposición busca desmarcarse de acciones violentas pese a declaraciones de asesores
“La salida es democrática, pacífica y electoral”. Esta frase ha sido repetida por la oposición venezolana desde hace años, y con mayor frecuencia desde 2016, cuando el entonces presidente de la Asamblea Nacional Henry Ramos Allup, abogaba por la salida de Nicolás Maduro de la Presidencia de la República. Cuatro años después y relacionado con dos incursiones y alzamientos militares, Juan Guaidó y sus aliados buscan desligarse de acciones violentas y reivindicar la vía constitucional.
El domingo 3 de mayo se hizo público un intento de incursión militar por parte de un grupo de militares venezolanos y estadounidenses, lo que se denominó como operación Gedeón, con el objetivo de deponer a Maduro del poder, que la oposición y al menos 50 países aseguran está siendo usurpado en Venezuela.
Ese mismo día, el régimen de Maduro aseveró que se trataba de una operación orquestada por la oposición venezolana, Estados Unidos y Colombia para asesinarlo, al igual que a varios miembros de su gabinete y personas de su entorno. En distintas operaciones en los estados Vargas y Chuao, según los voceros oficiales se han capturado a 23 personas y abatido a otras ocho hasta la tarde del 7 de mayo. De estas últimas se desconocen sus identidades.
A partir de ese día, el gobierno interino de Juan Guaidó ha emitido cuatro comunicados para desligarse de esta operación, con algunas contradicciones a medida que pasan los días y hablan los implicados. En el primer comunicado, con fecha del 3 de mayo, dijo que presumían de dos versiones: La primera, “un montaje fabricado o un hecho delictivo manipulado por la dictadura”, mientras que la segunda opción que barajaban era “militares o civiles presuntamente ejecutados extrajudicialmente por la dictadura” con el objetivo de crear “un falso positivo”.
Un día más tarde se emitieron dos comunicados donde Guaidó se desligaba de vínculos con alguna “empresa de la rama de seguridad y defensa”, refiriéndose especialmente a Silvercorp USA, la empresa propiedad del estadounidense Jordan Groudeau, quien lo señalaba de incumplir un contrato de $220 millones para ejecutar una operación en territorio venezolano contra Maduro.
En ese mismo comunicado, Guaidó manifestaba su “respaldo total a la lucha del pueblo de Venezuela, y especialmente a los militares patriotas que arriesgan su vida por la defensa de la Constitución y nuestra nación”.
Para la noche del 6 de mayo, el gobierno interino insistía nuevamente en la versión del “falso positivo” creado desde el régimen de Maduro debido a que habían infiltrado la operación Gedeón. Además, se desmintió el contrato mostrado por Jordan Goudreau al sostener que no había ninguna relación actualmente con su empresa o que “el presidente Guaidó haya firmado un supuesto contrato con su representante”.
“Evaluando todas las opciones”
Desde que Juan Guaidó se juramentó como mandatario interino ha dicho una y otra vez que se encuentra “evaluando todas las opciones sobre la mesa” para lograr un cambio político, luego de desconocer y denunciar las elecciones de mayo de 2018, donde se proclamó a Nicolás Maduro como presidente, como un proceso amañado y plagado de irregularidades.
El también presidente de la Asamblea Nacional apoyó activamente el alzamiento militar del 30 de abril de 2019, que él mismo denominó como “operación Libertad”, y en ese entonces dijo que se trataba de una de las opciones “sobre la mesa” para lograr una transición política.
Desde entonces, Guaidó aseveró que se mantenía en contacto con militares “apegados a la Constitución” y ofrecía distintas garantías para garantizar la adhesión de este sector a sus planes.
De acuerdo a una investigación de The Washington Post, la operación Gedeón contó con casi un año de antelación desde suelo estadounidense y era una estrategia conocida por un grupo de dirigentes opositores, incluso por el mismo Guaidó.
Juan José Rendón, asesor político de Guaidó y parte de su comité de estrategia, detalló que un grupo de opositores sostuvieron una reunión con el exmilitar estadounidense Jordan Goudreau.
Ya el comité, donde también se encuentra el diputado Sergio Vergara, había analizado otras propuestas con potenciales asociados; sin embargo, estas opciones fueron desechadas debido al monto que solicitaban para ejecutar una operación de esta magnitud en suelo venezolano.
Goudreau, por su parte, llegó con una propuesta de una misión autofinanciada que solo necesitaba una garantía inicial. Su tarifa total sería de 212,9 millones de dólares, menos de la mitad de lo solicitado por otros candidatos. El exmilitar aseguró tener a su disposición 800 hombres entrenados dispuestos a invadir Venezuela y capturar a Maduro.
Las negociaciones continuaron hasta que en octubre llegaron a un acuerdo, sujeto a fondos y otras condiciones. Rendón lo llamó un “globo de prueba” para determinar lo que el exmilitar estadounidense podía hacer.
Pero el analista aseveró que poco después de alcanzar el acuerdo inicial, Goudreau le pidió un pago inmediato de 1,5 millones de dólares a pesar de que no mostró evidencias sobre ningún respaldo financiero que aseguraba poseer para financiar la operación, ni sobre esos supuestos 800 hombres.
Rendón le transfirió solo 50.000 dólares para que cubriera gastos, presuntamente de su propio dinero y no como un pago del gobierno interino.
El 16 de octubre volvieron a hablar, esta vez con la participación directa de Juan Guaidó vía telefónica para firmar el acuerdo. En una grabación hecha secretamente por Goudreau, y que fue obtenida por The Washington Post, se le escucha al líder opositor decir: “hacemos lo que es correcto para el país. Estoy por firmar”.
No obstante, Rendón afirmó que finalmente Guaidó no firmó el documento pues reportes del comité estratégico le hicieron dudar sobre Goudreau. “Todos teníamos nuestras sospechas sobre Goudreau y el presidente no estaba cómodo con eso”, dijo el asesor político al periódico estadounidense.
Goudreau ha reiterado en varias entrevistas que Guaidó sí firmó el documento, y entregó al Post un texto de siete páginas en donde figuran las firmas de Guaidó, Rendón y del diputado Sergio Vergara; mismo acuerdo que le enseñaría a la periodista Patricia Poleo poco después de ejecutar la operación fallida.
J.J Rendón contrastó este hecho entregando al periódico el documento completo que no mostraba por ningún lado la rúbrica del presidente del parlamento, aunque sí la suya, ya que se trataba de una exploración preliminar.
A pesar de los desacuerdos, el plan siguió en pie de manera formal hasta noviembre de 2019. Goudreau y Rendón tuvieron una fuerte discusión en la residencia del venezolano, en Miami. El asesor político asumió que esto supondría la muerte de la operación Gedeón.
Rendón destacó que no volvió a tener noticias sobre el exmilitar hasta pocos días antes de que se diera la operación, ya que recibió una carta de los abogados del exmilitar, que le solicitaban terminar de pagar 1,45 millones de dólares. Luego, el domingo 3 de mayo se enteró sobre el intento fallido de una incursión militar por la costa de Vargas y las declaraciones de Goudreau sobre el hecho.
El desmarque opositor
Horas antes de la publicación de la investigación de The Washington Post sobre la operación Gedeón y las declaraciones de J.J Rendón a CNN en Español, se hizo público un comunicado firmado por nueve partidos políticos de oposición donde aseguraron que “las fuerzas democráticas no promueven ni financian guerrillas, focos de violencia ni grupos paramilitares”, a pesar de que públicamente dieron su apoyo al alzamiento militar del 30 de abril de 2019, donde se registraron dos muertos y decenas de detenidos.
Acción Democrática, Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo, Voluntad Popular, la Causa R, Encuentro Ciudadano, Movimiento Progresista de Venezuela, Proyecto Venezuela y Copei señalaron que a pesar de que han hecho llamados públicos a toda la sociedad, civiles y militares para lograr un cambio democrático, “no debe hacer falta sacrificar más vidas”.
Acción Democrática@ADemocratica
#ATENCIÓN
Comunicado de las fuerzas democráticas venezolanas: no promovemos ni financiamos guerrillas, focos de violencia ni paramilitares. Urge un Gobierno de Emergencia Nacional con todos los sectores del país para abordar la crisis que atraviesa Venezuela.
15522:27 – 6 may. 2020Información y privacidad de Twitter Ads195 personas están hablando de esto
Emilio Graterón, coordinador político encargado de VP, dijo que su organización política no iba a emitir mayores comentarios sobre la operación Gedeón y se apegaban a los comunicados emitidos por el gobierno interino. Representantes de otros partidos políticos de oposición comentaron a TalCual que su posición se mantenía en conjunto sobre estos hechos y rechazando cualquier acción violenta.
“La violencia solo es promovida por quienes usurpan el poder desconociendo que la soberanía reside en el pueblo. Las fuerzas democráticas apuestan por una salida en paz, que brinde tranquilidad y estabilidad a todos los venezolanos y sus familias”, afirmaron estos nueve partidos en su escrito.
Además, estas organizaciones políticas ratificaron que su propuesta de salida política, que incluye a todos los sectores del país, es constituir un Gobierno de Emergencia Nacional para abordar la crisis. También se refirieron a la vía electoral. “Las fuerzas democráticas han señalado una y otra vez que tiene como fin recuperar la soberanía popular para que los venezolanos libremente, a través del voto, decidan el destino que aspiran y que merece este país”.
Con información de Tal Cual